La deforestación y minería ilegal es un problema grave del que tal vez solo se llega a tener una comprensión cabal con las imágenes tomadas, desde el espacio, sobre los páramos contaminados en la selva de Madre de Dios por obra de la minería ilegal.
Es un viejo problema que lleva a la Fuerza Aérea del Perú (FAP) y a la Agencia Espacial del Perú (Conida) a usar no solo el satélite peruano PeruSAT-1 sino un soporte tecnológico mayor, incluso con organizaciones privadas, como en el que hace poco participaron la empresa de drones UAV Perú, las compañías Perú Flying Labs y WeRobotics y la Universidad de Harvard, entre otros.
De acuerdo a imágenes nuevas obtenidas por el PerúSAT-1, tan solo en la zona de Inambari-Madre de Dios hay 50,926,708.95 m2 de áreas afectadas por la deforestación minera, 16,877,037.37 m2 por deforestación por tala y 2,660,786.241 m2 de agua contaminada.
“En las imágenes se aprecian panoramas completamente desoladores que desde tierra no son fácilmente apreciados o dimensionados, en cambio desde el espacio tenemos un escenario complejo y data precisa para actuar”, comentó a EXPRESO el jefe institucional de Conida, teniente general FAP Carlos Caballero León.
Como ya es público, hay un paquete de 20,000 imágenes reveladoras que registran el devastador impacto de la minería ilegal en la selva de Madre de Dios y que serán enviadas a las autoridades para iniciar acciones legales por delitos ambientales.
“El principal cambio, aunque parezca poco significativo, es que las instituciones públicas entiendan cómo se organiza el patrón de deforestación y minería ilegal. Las imágenes satelitales han logrado determinar que en plena selva virgen, donde aparentemente no hay rastro del hombre, se ubican trochas o triángulos que son puntos de partida de actividades ilícitas”, comentó.
Agregó que uno de los objetivos es levantar información obtenida y ponerla a disposición de los usuarios; sin embargo, cuando se ubica algún indicio de actividad irregular actúan de oficio y las ponen a disposición de las instituciones interesadas, sea la misma Fuerza Aérea del Perú, la Fiscalía o la Policía Nacional para que la información obtenida sea utilizada en prevención de delitos y remediación de daños.
“El trabajo que realizamos se complementa con el de la Fuerza Aérea pues nuestro satélite nos muestra la zona afectada y brinda tomas a nivel de detalle, pero, cuando queremos sectorizar, los aviones de la FAP hacen un mapeo del lugar”, añadió.
Lo anterior significa que el Departamento de Justicia de Estados Unidos podría tener estas últimas imágenes para ser usadas en el proceso de lavado de activos por cerca de US$ 5,000 millones en el que están implicados presuntos traficantes norteamericanos, un inglés, un ecuatoriano-norteamericano y procesados peruanos del caso Peter Ferrari.
Caballero agrega que en el paquete de imágenes hay varias del PerúSAT-1, el único satélite submétrico de Sudamérica que se encuentra en órbita desde el 15 de septiembre de 2016.
“Es un satélite de observación de la tierra de tipo óptico que capta entre 300 y 400 imágenes por día, con resolución submétrica, de diferentes partes del mundo. Dicho material ayuda a detectar y poner en alerta las zonas afectadas por la minería ilegal y deforestación”, reiteró.
El alto oficial FAP indicó, además, que hasta la fecha la institución que dirige tiene registradas 322 entidades públicas que pueden acceder de manera gratuita al catálogo de imágenes obtenidas por el PeruSAT-1 y solicitarlas.
Convenios para el uso del radar SAOCOM-1
Debido a la abundante nubosidad del país existen sectores del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) donde el PerúSAT-1 aún no ha podido obtener imágenes de detalle; sin embargo, un satélite radar de observación sí lo lograría.
“El 6 de octubre próximo, Argentina va a poner en órbita un satélite de observación de la tierra de forma radar denominado SAOCOM-1, y ya hemos tenido conversaciones muy avanzadas para realizar intercambio de imágenes. De forma que sin tener propiedad soberana de un satélite adicional podemos beneficiarnos a través de los convenios internacionales”, precisó el general Caballero.
No obstante, no descartó que en el futuro el Perú implemente otro satélite que complemente las labores del actual.